Primero.- El objetivo de este blog quedó claramente definido en mis palabras introductorias: debatir aspectos referidos a lo que denominamos sociedad civil en momentos tan singulares como el que nos toca vivir y, al tiempo, considerar juntos cuestiones referidas a lo que podríamos llamar camino individual o cualquier otra expresión al uso que pueda tener conexión, con creencias o sin ellas, con esos otros aspectos de la vida individual y comunitaria a la que solemos llamar trascendencia.

Segundo. La experiencia vivida en estos casi tres meses de vida la resumo del modo siguiente:

2.1. El programa de control del blog indica miles de entradas diarias y casi diez mil páginas (habitaciones) visitadas cada día. Esto quiere decir que son muchas las personas a quienes interesan los temas que debatimos. Siento cierta responsabilidad de no defraudar esas expectativas.

2.2. Al tiempo se ha producido lo siguiente:

1.Los asuntos tratados merecen comentarios en cantidades importantes. Esto quiere decir que hay mucha gente que visita y muchos que se atreven a expresar sus opiniones. Este dato indica interés.

2.Sin embargo, admitamos cierta confusión entre el comentario al asunto del día y el propio de un chat. El chat indica vida del blog y fomenta el sentido de comunidad. En ese sentido es positivo. Sin embargo no a todos interesan esos comentarios, así que sería conveniente mantenerlos diferenciados.

3.Las presencias, como es normal en internet, se llevan a cabo desde el anonimato. Eso permite insultos gratuitos y una actividad que parece tener como único objetivo tratar de destruir el blog. Ayer mismo, dos personas entraron a insultar. Ninguna de ellas con dirección de correo verdadera. Además cambiaban de dirección en cada comentario…El sistema fomenta el anonimato y con él la peor cobardía. Y son muchos los que sienten que nos les convienen lo que aquí consideramos y debatimos. Lo comprendo, porque he vivido su temor y su cobardía. La mentira desde el anonimato carece del menor interés. No consumamos energías en ellas.

4.Admitamos también excesos en el lenguaje. En ocasiones la vehemencia o hasta el sentido sarcástico o la burla de uno mismo lleva por caminos del lenguaje mas bien impropios o que no todo el mundo entiende. En ocasiones ofenden, con razón o sin ella. Y separan del asunto principal. Debemos cuidarlos

5.La censura no me gusta. Es, además, hasta cierto punto imposible de ser mantenida, porque la facilidad con la que se elabora/destruye una cuenta de correo es total. No sirve de mucho poner de esa manera puertas a este campo.

6. La experiencia ha demostrado que el mero autocontrol, por llamarlo del alguna manera, no ha funcionado. Tratar de controlar los post individualizadamente exige esfuerzo personal que no puedo llevar a cabo en solitario, ni tampoco considero crear un mecanismo administrativo dedicado a esta misión. Al menos al día de hoy. Por otro lado, como digo, la facilidad de esconderse en nombres y direcciones falsas es absoluta y nunca evitaríamos del todo a esos pocos que practican la miseria moral como actividad principal de sus vidas.

7. Evidentemente siempre existirán personas que se crean en posesión de la verdad, que consideren que su presencia/ausencia en el blog es determinante, que decidan irse de nuestros temas si no nos ajustamos a sus preferencias, que desean ser protagonistas a cualquier precio, o que sufren de patologías de uno u otro tipo y las vierten en sus comentarios. Como no es evitable al cien por cien su presencia y comentarios habrá que centrarse en lo que merece la pena.

2.3. Por otro lado, es mi idea en el futuro tratar de reproducir, formateando adecuadamente, los debates de este blog en algún producto escrito, sea un libro, una revista electrónica mensual…no lo sé. Pero para ello es necesario centrar los debates en sus objetos propios. También he pensado la posibilidad de dar a conocer el blog a colectivos de personas que puedan estar interesados en compartir experiencias y opiniones con nosotros. Para ello debemos depurarlo de lo que no contribuye a esta finalidad.

2.4. Con ello la premisa básica para seguir consiste en que unos pocos no destruyan el interés de muchos, y, al tiempo, mantengamos el sentido de comunidad y diferenciemos los asuntos de debate de las conversaciones sobre otros temas. La cuestión es ¿cómo?. He pensado durante estos días y he consultado al respecto. Todavía debido a las fiestas no he podido tratar la cuestión con expertos informáticos, así que lo que hoy escribo queda pendiente de que mañana/pasado pueda validarlo.

2.5. El modelo a implantar para seguir, que sigue las sugerencias de muchos de vosotros, se basaría en las siguientes premisas.

1. Se diferencian dos espacios. El primero, propio del objeto de debate diario. Los comentarios en el mismo deben de ceñirse a lo que de modo directo o indirecto tenga conexión con el asunto que nos proponemos debatir.

2. El segundo espacio es propio de un chat. No hay tema. Quienes deseen comunicarse con el resto de personas del blog en espacios personales de comentarios deberán hacerlo en esta segunda ventana que se abrirá nueva cada día. Los comentarios del chat se mantendrán por espacio de dos días al menos.

3. Para escribir en el blog, en una y otra ventana, es necesario estar registrado. Ningún comentario saldrá a la luz del blog si no es efectuado por una persona que tenga registro de acceso.

4. El registro es tan sencillo como dirigir un correo a blog.marioconde@mac.com. Se necesita remitir una dirección de correo válida. Se supone que los datos personales que se faciliten para identificar serán verdaderos. Admitida la presencia en el blog solo saldrán a la luz los comentarios que procedan de esa dirección de correo. Si el usuario quiere usar nick en la aparición publica de su comentario, asi será. Si prefiere nombre y apellidos, asi será. Al redactar el comentario eligirá la opción que prefiera.

5. Todos los datos que se envíen, personales y dirección de correo, son guardados en el blog y no se difundirán a nadie, salvo, claro, imperativos legales.

6. En el lenguaje se deberá guardar el respeto normal a las personas y las reglas usuales de comunicación. Pero no debe nadie sentirse ofendido ante cualquier comentario que pueda parecernos algo excesivo. El sentido del humor es muestra de inteligencia.

7. A todos los que venís colaborando con el blog de modo asiduo os registraré en cuanto funcione el sistema de manera automática, aunque solo con una dirección de correo que es la que me habéis facilitado ayer o la que funcionaba en días pasados y que figura en la intranet. A los nuevos que se incorporen se le registrará comprobación solo que la cuenta es cierta y se corresponde con quien dicen ser. Su nombre no aparecerá si prefieren que el comentario salga con un nick a la luz publica preservando su verdadera identidad. Depende de cada uno

8. Ya se que con ello ralentizamos algo el funcionamiento del blog y que tal vez la separación entre asunto y chat como habitaciones diferenciadas cree alguna complicación. Pero es, creo, un mal menor a la vista de lo sucedido. Y, sobre todo, porque los nicks y direcciones de correo falsas con las que atacar la existencia del blog con descalificaciones e insultos vacíos de cualquier razón se han a multiplicar a medida que nosotros sigamos creciendo. Se trata de poder seguir debatiendo de nuestros temas sin interferencias nacidas del odio, la paranoia, la mala fe, el temor y otras disfunciones de la personalidad de que hacen gala algunos.

9. Debo reservarme el derecho de cancelar la autorización de registro cuando los comentarios violen de modo notorio las reglas que establecemos para el blog en beneficio de todos.

2.6. A quienes tenéis sincero interés en el blog os pediría hoy lo siguiente:

1. Que me comentéis el sistema que propongo y aportéis las sugerencias que estiméis adecuadas. Esta tarde estaré de nuevo en Madrid y podré atender internet sin las enormes limitaciones que tengo aquí.
Para facilitar las cosas hoy abro ya las dos ventanas. Una para este asunto y otra para el chat diario. Os ruego comprobéis si puede funcionar.

2. No prestéis por favor atención a comentarios que obviamente van a seguir existiendo cuya motivación es tan obvia como despreciable. No contestéis. No perdamos tiempo. Siempre se producen, os lo aseguro, desde identidades y direcciones falsas. No consumáis tiempo en fantasmas inexistentes. Tenemos suficientes fantasmas reales como para dedicarnos a productos de feria barata. Contestarles es atender sus propósitos, darles entidad de la que carecen.

Quizás con ello consigamos que este blog siga. Si es así, que así sea. En cualquier caso a todos los que nos habéis seguido y a quienes habéis participado,

Muchas gracias

Mario Conde