Un paso mas en eso del control social del crédito. La aventura de vivir

      Comentarios desactivados en Un paso mas en eso del control social del crédito. La aventura de vivir

83otono 3

Creo que la unanimidad en torno a la problemática actual en lo que respecta al efecto del sistema financiero es constatable, salvo, quizás, en los entornos de los propios bancos, se entiende. Los comentarios que he recibido a raíz de mi intervención en InterEconomía el pasado lunes van todos en esa dirección: lo que sucede es que los bancos no prestan dinero, reducen las pólizas de crédito, no descuentan las letras…en fin, dejan de prestar servicios elementales. No se trata, solo, de que en las mismas sucursales, en idénticas oficinas, las mismas personas que antes nos presionaban para que pidiéramos un crédito, con o sin garantía hipotecaria, ahora te niegan el pan y la sal. Y no le echemos la culpa a los directores de esas sucursales. Obedecen instrucciones. Y en muchas ocasiones les cuesta tener que ejecutarlas. Porque son conscientes de los efectos que provocan.

En el mejor de los casos el coste del dinero se ha incrementado de manera brutal. Así que los periódicos publican rebajas en el Euribor y cuando sales de la sucursal bancaria correspondiente resulta que te llevas a casa, en la hipótesis de que consigas dinero, un aumento brutal del coste, medido en tipos de interés y comisiones. Y cuando ya superas un poco la sensación de alivio por disponer de dinero para pagar la nómina, es inevitable que te preguntes: pero, ¿no es nuestro dinero el que el Gobierno da a los bancos?. Así que nosotros lo aportamos a coste cero, al menos a coste cero para nuestras economías privadas, y nos lo devuelven, en el mejor de los casos, aumentando los tipos de interés que pagamos. ¿Como se entiende semejante círculo diabólico? Y por si fuera poco resulta que los bancos publican cifras de enormes beneficios, mientras las empresas del sector real, las que sufren esas restricciones de crédito, van a empezar a publicar cifras de pérdidas considerables. Por eso el otro día pensaba: está bien eso de bajar los impuestos sobre los beneficios empresariales, pero como las empresas se dediquen a tener pérdidas esa medida no sirve para casi nada…

Mientras los bancos subsisten las empresas desfallecen y muchas mueren y con ellas vocaciones empresariales.¿Qué es lo que verdaderamente está pasando? Antes se decía que las crisis bancarias se debían a que a los bancos buenos los tumbaban las empresas malas. Ahora parece que es al contrario, a las empresas buenas las tumban los bancos malos. Y el público presente en este gigantesco salón de actos que es España parece que asiste al espectáculo mas o menos impasible, al menos en lo externo. No aplaude, pero tampoco dice nada en voz alta.

“Es que no entiendo de economía” dicen algunos. No hace falta entender de ecuaciones matemáticas para saber que el Estado tiene el dinero que produce la sociedad civil, que lo capta mediante la coerción impositiva y que si se endeuda (Deuda Publica) al final es el país, esto es, nosotros, los que nos endeudamos, nuestras economías privadas. Así que esto no es dificil de entender. Y si no es complicado de entender, lo que resulta dificil de comprender es que la sociedad permanezca inerte ante ese círculo extraño. Pero así viene siendo secularmente. ¿Así continuará?. Pues de nosotros depende. No de Dios, desde luego, que no se ocupa de estas cosas y nos deja margen de actuación.

Internet dispone de una libertad real distinta de la propia de los medios de comunicación tradicionales, en papel o electrónicos, que viven de la publicidad, porque el poder de contratarla tiene ciertas leyes… En tiempos de bonanza la libertad es mayor. En los de penuria, como estos, sencillamente menor. Problema de susbsistencia.

Bueno, pues al grano. Si el problema es el circuito financiero, la cuestión es: ¿van a volver a seguir las cosas como eran antes? No se trata ahora de que se exijan responsabildiades a unos señores que presuntamente han causado daños globales a la economia mundial. Primero, porque no me creo que ese planteamiento sea cierto en la profundidad de lo que sucede. Es eso, sin duda, pero mucho mas que eso. Segundo, porque con esas responsabilidades no se consigue nada mas que unos políticos encuentren, al menos de cara a la galería, culpables de sus actos directos u omisivos.

De lo que se trata es: ¿debe seguir vigente el mismo modelo de organización del crédito? Dicho mas claramente: la economia real necesita dinero para funcionar. Ese dinero proviene del ahorro de los españoles. Ese ahorro se canaliza a través de los bancos y entidades financieras. Pues bien, hemos comprobado como algunas prácticas bancarias, nacidas del dogma impulsado desde el Banco de España de separar radicalmente a los bancos de las empresas, hasta el extremo de no importarles que esas empresas quebraran (lo oí con mis oidos de presidente de Banesto), esas prácticas bancarias derivadas de un modo de comportamiento originado por un modo de pensar que se convirtió en “ortodoxo”, han provocado, están provocando y seguiran provocando eso que eufemísticamente llaman “disfunciones” a la economía real. Yo creo que no es blasfemia llamarlos daños a las empresas encargadas de producir riqueza. Porque, personalmente creo que los bancos no producen riqueza real. Al menos no tengo esa experiencia en mis años de presencia en el sistema financiero. Y, desde luego, los bancos que respondían a la pureza del modelo ortodoxo impulsado desde los reguladores, podían crear cosas, pero riqueza real, lo que se dice riqueza real,yo no conseguí verla. Quizás sea un problema de visión. No lo se. Los que entendían que su misión principal era financiar a las empresas creadoras de riqueza, respondían a un modelo que me gustaba. A mí, pero a los reguladores de entonces (que son los de hoy) no.

Si somos conscientes de que el sector real de la economia necesita el dinero para vivir, entonces ese dinero se convierte en un bien social. En un instrumento indispensable en el proceso creador de riqueza. Como una carretera, por ejemplo. Asi que pasa a ser un bien colectivo. Si encima deriva del ahorro colectivo, pues la cuestión es diáfana. Al menos para mi. Entonces debe recibir un tratamiento adecuado. Un bien colectivo necesita de un control colectivo. Es un puro mecanismo de lógica el que inspira estas conclusiones.

Dice Jesus Parra en este blog: “efectivamente, las entidades financieras solo venden el producto que les interesa a ellas, presionando a sus trabajadores para colocarlo, aunque este sea una auténtica estafa, es decir quieren ganar con el dinero de otros. Al final tan solo somos gotas de agua en la inmensidad del oceano siempre hay una mano invisible que nos mueve a su antojo”. Claro pero es que manjena el dinero de todos los que allí lo depositan y coel financian -o deberían. el proceso de craciond riqueza. Esa es la funcion del suministro de fondos al sistema

Señala Jaime de Genova: “Sólo cuando entendamos cuál es la función real del dinero, sólo cuando se entienda que el dinero noes riqueza, y cuando se cese en la práctica de los intereses por la simple existencia del dinero, en lugar de hacerlo sólo cuando el dinero se presta a un tercero, sólo entonces se destruye al poder del dinero, este cáncer monstruoso que está destruyendo el corazón de la nación. Desde ese día, Soddy será recordado como uno de los arquitectos de la nueva era.”

Pues recordemos a Soddy, pero empecemos a actuar además de recordar. ¿Como?. Bueno, este Blog ya es una forma de actuar. Infinitesimal,desde luego, pero…. Si tenemos claro que el suministro de dinero al sistema es un bien colectivo y que al bien colectivo debe corresponderle un control colectivo, entonces nos situamos ya ante una nueva mentalidad, un nuevo modo de ver las cosas,(aunque lo nuevo sea muy viejo) y ahora tenemos que debatir cómo se organiza.

Por ejemplo: ¿es posible un control social distinto de un control político?. En estos momentos, con una sociedad civil que no es sino una prolongación del poder politico/mediatico/financiero, pues no lo veo fácil, desde luego. No se trata, al menos no trato, de destruir nada. No me gustan las máquinas de derribos. Trato de construir una idea, la de que somos responsables de nuestro destino, y busco un modo de convertir una idea elemental en un producto real, vivido, instalado en la sociedad. Simple, ¿no?.

Dijo Hans Hans “Es cierto que Conde invita a un esfuerzo de reflexión pero cae en saco roto: la gente llega aquí con las ideas ya puestas y con generalidades les sobra. Como apunté más arriba, los españoles son vagos pero sobre todo para pensar”. Quitemos la palabra vago y sustituyámosla por la de que no es fácil pensar en un país en el que la inducción es la técnica mas utilizada para control social. Desde los medios se introduce en la mente de las gentes las premisas mayores necesarias A partir de ahi, y con cierta ayuda en la premisas menores, llegan a las conclusiones deseadas. Lo que convierte al modelo en eficaz es que los miembros de la sociedad asi controlada creen que piensan por sí mismos….

Bueno pues ya está mas o menos claro qué entiendo por control social del crédito. Lo que no tengo definitivamente perfilado es el modelo para organizarlo. Tal vez de este blog deriven ideas. Ideas…ni mas ni menos que ideas. Eso que dicen puede cambiar al mundo….

Ayer comentaba con alguien que tiempo atrás latía en mi una frustración importante: Llegué tarde a los tiempos en los que se descubría la tierra, me habría maravillado poder ascender desde Río de la Plata hacia las montañas de Perú. Llego demasiado pronto a los tiempos en los que se descubrirá el cosmos, lo que sería mi máxima ilusión, acercarme físicamente a la noción de infinito…. Me tocaron -pensaba- tiempos inertes, aburridos, sin aventura…Pues parece que no.

Es posible que la tragedia que se esconde para muchos detrás de lo que está sucediendo provoque una agitación de las mentes que lleven a iniciar un camino de búsqueda de una nueva forma de organizar las relaciones de los hombres con la cosas y de los hombres entre sí. Quizás estemos ante una nueva aventura, un nuevo episodio, tal vez inesperado, de la increíble aventura de vivir. Ojalá…..